Hecher Sosa: "Mi manager me había comentado que con una victoria era muy probable que entrara en UFC"
El luchador lanzaroteño, a un paso de cumplir su sueño
Nuevo combate para el lanzaroteño Hecher Sosa en la aclamada MMA Fight Club Rush 18 escandinava y nueva victoria en Suecia, de la que nos ha dado todo lujo de detalles en el último programa de GradaCero.
En su regreso de Suecia, Sosa afirma estar "muy contento por tener otra victoria, por estar ahora aquí con mi familia. Además, estoy sano, sin lesiones, sin golpes", declara haciendo referencia a lo realmente bien que le fue en ese combate del que vuelve a la isla sin inconvenientes físicos. Todo ello a pesar de que el rival, el británico Aaron Robinson, no iba a ponerle las cosas fáciles al lanzaroteño, quien finalmente logró sumar su séptima victoria profesional por decisión unánime de los jueces.
Este nuevo logro tiene mucho más significado ya que puede catapultar a Sosa hasta la UFC, después de posicionarse un paso más cerca de ese objetivo y sueño personal.
"Ya antes de la pelea había hablado con mi manager, quien me había comentado que con una victoria era muy probable que entrara en UFC, ya que vienen a España en 2024. Gané, así que ahora toca estar a la espera de lo que se pueda decidir", afirma un Hecher que está a la espera de esa ansiada llamada, lo que no significa que no siga programando nuevos retos. Y es que reconoce que "estoy buscando una nueva pelea, para ver si sale para el mes de febrero o marzo. Ya estoy entrenando para ello".
En cuanto al transcurso de ese último combate, el equipo de Sosa lo afrontaba con algo de incertidumbre al tratarse de un contrincante del que se tenía poca información, pero que parecía contar con bastante experiencia, siendo un deportista nato y portando un cinturón negro de jiu-jitsu brasileño, además de encontrarse entrando junto al equipo de Next Generation de la UFC.
Hecher se preparó de cara a un luchador muy agresivo y explosivo. El historial del británico dejaba un dato claro: había ganado todas sus peleas en el primer asalto. Pero cuando Sosa llegó al combate, el guion cambió completamente. "Me dejó fuera de juego porque no me atacaba. Estuvo muy cerrado, esperándome en todo momento", detalla el conejero, "seguramente él también me habría estudiado, cambió por completo su 'game plan' y por unos momentos le funcionó porque en un primer momento me dejó un poco descolado, pero al final me adapté y saqué la pelea adelante".

Sosa cambió rápido sus planes para lograr finalmente esa nueva victoria. "Reaccioné sobre la marcha. Vi que él no estaba proponiendo nada, así que empecé a tantearle, a moverme y a dar golpes por fuera", siempre teniendo en mente que la respuesta de Robinson podría darse en cualquier momento, "cuando un luchador se planta algo más es para pegar más fuerte cuando entras en su zona de golpeo".
Tanto fue así que, ya desde el primer asalto, Sosa casi logra finalizar con un gran movimiento giratorio, con la mala fortuna que se resbaló, como le pasó en alguna que otra ocasión más debido a que accidentalmente había pisado vaselina antes del combate. Robinson intentó aprovechar dicha ocasión, pero el conejero se defendió a la perfección con una llave de piernas.
Esa capacidad de saber leer al contrincante y de poder adaptarse a la propuesta del rival testifican la gran evolución de un Hecher Sosa que cumple con rotundidad cada paso para llegar a la UFC.
Contra Robinson, el lanzaroteño volvió a demostrar que es un luchador muy completo, con físico y que además se puede adaptar a cualquier tipo de lucha, capaz de dar un giro al guion establecido y dando espectáculo en un octógono en el que su alto repertorio de movimientos le hacen imprevisible para cualquier rival.
A base de trabajo, Sosa ha demostrado que sigue y seguirá luchando por su sueño, sumando un nuevo destino internacional más a esa lista que no para de crecer de lugares a los que acude para seguir creciendo como deportista.
Esta vez ha sido Tijuana, donde acudió para un nuevo tipo de preparación en el Entram Gym que parece haberle dado sus frutos. "Me curtí mucho allí, también me hizo quererlo un poco más porque estuve allí tres semanas solo. Pero al final cuando alguien tiene un sueño y lo tiene tan claro como yo, nada ni nadie va a conseguir pararme. Así que siempre hay que mirar para adelante, positivo. Todo este sacrificio, todo este dolor, será compensado cuando me llame Dana White [presidente de la UFC]. Entonces será cuando todo esto habrá valido la pena", sentencia Sosa.